Bienvenidos a estas palabras del alma. Que todos nos reencontremos en el instante de su eternidad.


Minicarta para el Poeta Efluvista de su amigo Metapoeta 


Estimado Virgilio.

Muy bueno este HORIZONTES y toda tu Poesía Efluvista.

          En el tránsito de tus publicaciones he visto que la Poesía del Efluvismo avanza. Y me alegro por ti, por la poesía y la creación. Me alegro porque vives una segunda vida poética y creativa de niveles excepcionales.
          Tus efluvios, en el panorama de la literatura nacional y mundial –vía internet- abren otra ventana de creación. Posibilitan otra vertiente del decir poético con tonadas aromadas de metalenguaje que le hacen colindante al metapoema. Indicativo éste que se dice y sustenta en los textos teóricos que has compartido en la red desde aquellos intercambios de ideas (efluvista-metapoético) sostenido con nuestro querido amigo común metapéta Ike Méndez en esos comienzos efluvistas. 
          Mi siempre recordado amigo, dada la excelencia poética efluvista que degustamos cuando nos acercamos a esta nueva  Poética tuya, pienso  (y lo hago desde mi humilde comprensión) que las muestras teóricas presentadas hasta ahora acerca del Efluvismo no son lo bastantes contundentes como lo son los textos. Esta afirmación la hago en la certeza de haber estudiado cada uno de los documentos que has publicado en tus espacios de internet.
          Sigo pensando Virgilio, y a la vez TE ANIMO –y este es el propósito 
fundamental de estas líneas- a profundizar, a reflexionar y a escribir mucho más para alcanzarle, AL EFLUVISMO, ese mundo teórico explicativo
que todo movimiento de creación posee. Sé, amigo, que la modestia te invade al no dimensionarlo así. Pero, te confieso por lo que he visto, que con EL EFLUVISMO, haz cimentado las bases del movimiento dominicano de la última década. Amigo y hermano te insto a darle el carácter que ya se han ganado tus efluvios.        
           En ese sentido, el Efluvismo debe seguir madurando. Por lo que debe asumirse como proyecto-corriente de creación, sin la timidez justificativa de un particular hacer-decir. La Poesía del Efluvismo debe plataformarse sobre una estética, una ética-moral y una filosofía que le dé fisonomía e identidad en su pureza. No hay vuelta atrás. La apuesta Efluvista está lanzada y  marcha. Ahora tienes que prepararle la infraestructura e iniciarla en los avatares confrontativos y críticos de esta realidad posmoderna. Sé que no era la pretensión, pero hay que seguir. Dale esa satisfacción a las letras nacionales y universales.

Tu siempre amigo y hermano


Bernardo Silfa Bor